Mazda CX-5 2017

El CX-5 2017 es un modelo histórico y estratégico para Mazda. Es histórico porque introdujo la tecnología SkyActiv en el motor de la marca en 2012 y estratégico porque es el modelo más vendido del fabricante japonés en muchos mercados, precisa el concesionario de coches segunda mano Crestanevada.

Esta nueva generación se presentó en el Salón del Automóvil de Los Ángeles a finales de 2016 y luego hizo su primera aparición europea recientemente en el Salón del Automóvil de Ginebra. La primera observación es que, estilísticamente, aunque hay algunos cambios, son leves pero fácilmente perceptibles. Las principales están en el frontal con una parrilla más ancha y alta resaltada con cromo. Está rodeado por unos faros más finos y modernos con una elaborada firma visual. Estos cambios refuerzan sin duda el dinamismo del CX-5, que ya estaba presente. Los más observadores se habrán dado cuenta de la separación entre el capó y la parrilla de perfil, siendo el primero ligeramente más largo.

Por lo demás, las líneas generales no cambian realmente, ni de lado ni de atrás. Lo mismo ocurre con las medidas, ya sea la longitud (4,55 m), la anchura (1,84 m), la altura (1,67 m) o la distancia entre ejes (2,70 m).

En consecuencia, no hay grandes cambios en los aspectos prácticos del coche, ni en el espacio para los pasajeros traseros ni en el del maletero, con una capacidad que va de los 506 a los 1.620 litros, es decir, 6 litros más que el primer CX-5. Valores que se mantienen en lo más alto de la categoría, sólo por detrás del Volkswagen Tiguan y el Peugeot 3008.

Si la estabilidad está a la orden del día cuando se trata de la practicidad, no se puede decir lo mismo de la distribución interior, como en el caso del salpicadero. Menos macizo y más rectilíneo, se distingue del anterior por una pantalla multimedia que ya no está integrada sino que sobresale como en el Mazda 2 y 3. Todavía no es sensible al tacto, sino que se controla mediante un mando en la consola central. Aunque mide 7 pulgadas, parece muy pequeño en comparación con otros modelos de la competencia. Entre otros cambios, las salidas de aire se han modernizado con una forma menos rectangular y los mandos del aire acondicionado se han colocado más abajo.

Aunque tuvimos en nuestras manos los modelos de preproducción, la calidad de los materiales parecía ser mejor, con plásticos espumados y muy buenos ajustes. De este modo, Mazda se acerca a las referencias del segmento.