Citroën vuelve al mercado de los monovolúmenes con el SpaceTourer. Este vehículo utilitario reconvertido sube de categoría y pretende incluso buscarle las cosquillas a los líderes del mercado. ¿Tiene los medios para hacerlo? Primer veredicto con la prueba de la versión 2.0 Bluehdi 180hp.
PSA continúa su colaboración con Toyota, esta vez en el ámbito de los vehículos utilitarios. Se llama SpaceTourer para Citroën, Traveller para Peugeot y ProAce para Toyota. Estos vehículos, que se fabrican en Francia, comparten el mismo chasis, los mismos motores y la misma tecnología de a bordo. Sólo el diseño varía según la marca. Tuvimos la oportunidad de probar la versión tope de gama del Chevron francés: BlueHdi 180 Shine EAT6 (caja de cambios automática). Esta versión está disponible desde 42.300 euros y pretende desafiar a los líderes del mercado, ya sean modelos premium como el Mercedes Clase V o generalistas como el Renault Trafic.
Al igual que sus pequeños compañeros de fábrica, el Spacetourer se basa en la última plataforma modular del grupo PSA diseñada para el transporte de pasajeros, puntualiza el concesionario de coches de ocasión Girona Crestanevada. Está disponible en tres tamaños: XS (4,60 m de longitud, nuestra versión de prueba), M (4,95 m) y XL (5,30 m). Puede acomodar hasta 9 pasajeros según la versión elegida y ofrece numerosas opciones de distribución.
Los asientos consisten en banquetas deslizantes, plegables y desmontables y en asientos individuales que ofrecen las mismas funciones. Lo que todos tienen en común es que ofrecen un generoso espacio para las piernas y un asiento amplio y cómodo. Si te dedicas al taxi, al VTC o al transporte de pasajeros, el SpaceTourer es la respuesta. Incluso es posible configurar algunos de los asientos para que sean cara a cara (versión Business Lounge). Y si simplemente eres el orgulloso padre de familia numerosa, puedes colocar hasta 6 sillas de bebé sin el menor problema. Y lo que es mejor, este SpaceTourer cuenta con dos puertas laterales deslizantes eléctricamente en la versión Shine, la más alta de la gama, que pueden abrirse con las manos libres. Ideal para el acceso al vehículo. La versión de entrada sólo tiene una puerta lateral deslizante, la segunda se ofrece como opción.
Por otro lado, la parte de la modularidad es más complicada. Todos los asientos y bancos son fácilmente desmontables, ya que basta con engancharlos a los raíles centrales. Por otro lado, necesitarás mucho esfuerzo para extraer los asientos individuales, que pesan unos 20 kg, y los asientos corridos, que pesan unos 50 kg. El volumen pasa de los 224 litros de la versión de 8 plazas a los más de 3,4 m3 de esta versión de pruebas que, recordemos, es la más compacta. Es una pena que el acceso al maletero no tenga asistencia eléctrica. El portón trasero es pesado y particularmente difícil de abrir. Citroën nos consuela con una ventanilla trasera que se abre, lo que resulta muy práctico en nuestra profesión para hacer fotos en modo de seguimiento, por ejemplo. En la vida cotidiana, resulta útil para transportar objetos largos.